NEUQUÉN (ED). — Con la cepa de Manaos en proceso de expansión, la situación se complicó de manera prácticamente vertiginosa en distintas localidades del interior neuquino. Eso muy a pesar de la campaña de vacunación y de la insistencia respecto de las medidas para evitar contagios.
Este fin de semana se supo que el COVID-19 mostró su rostro más cruel en Villa La Angostura; que la situación en Plaza Huincul y Cutral Co es crítica; y que el intendente de Villa Pehuenia, Sandro Badilla, pidió la suspensión de clases frente al avance de la pandemia. Los contagios, en toda la provincia, vienen rondando los 500 diarios.
En un comunicado, el hospital Dr. Arraiz de Villa La Angostura confirmó que en la semana murió el primer paciente de Covid-19 a la espera de una cama de terapia intensiva. Estaba en una sala “con asistencia respiratoria mecánica, acompañado y sostenido por el equipo de salud”, dijeron desde el centro asistencial y agregaron que por estas horas hay otro paciente que espera por una cama de terapia.
En la comarca petrolera la señal de alerta la lanzaron tanto las autoridades del hospital como la conducción del Colegio de Profesionales. “Como máximos responsables de los servicios médicos para ambas localidades sentimos la necesidad y la responsabilidad de informar que se está viviendo una situación crítica debido al aumento sostenido de los casos en las últimas semanas”, indicaron.
El mensaje vino acompañado por un pedido a los vecinos, para que extremen las precauciones y eviten la propagación de la enfermedad.
