BUENOS AIRES (NA). — El ministro de Seguridad de la provincia, Sergio Berni, llamó “terroristas” a los mapuches que protagonizan la toma de propiedades en Villa Mascardi, y culpó al Gobierno nacional por su inacción ante el conflicto.
“Hay una organización que se autodenomina mapuche e intenta llevar adelante sus acciones infundiendo terror, y para nuestro Código Penal eso es terrorismo”, definió Berni en el marco de un operativo de decomiso de 500 kilos de cocaína que se distribuía en el oeste del Gran Buenos Aires.
Además, el funcionario provincial denunció: “Me parece inentendible que el Gobierno Nacional haya estado prácticamente durante todo el año sin llevar adelante acciones contra un grupo que no solamente infunden terror sino que desconocen nuestras leyes y la constitución e ignoran nuestros símbolo patrio”,
Alejado del kirchnerismo desde hace más de un año, el ministro que responde a Axel Kicillof expresó: “En la Argentina no se puede admitir que un grupo de estas personas ignoren nuestras leyes y nuestra Constitución y pretendan generar un Estado por fuera de la República Argentina, porque nos ha costado muchas vidas sostener nuestra soberanía. La Argentina no se escinde ante nadie”.
En diálogo con LN+, Berni aclaró que su postura le trae conflictos internos, pero subrayó que su renuncia está a disposición del gobernador de la provincia de Buenos Aires.
Asimismo, enumeró: “Me llama la atención que durante el año hubo una mirada muy laxa con estos grupos. Vimos al Ministerio de Ambiente retirarse como querellante de las causas por usurpación de los parques nacionales, hemos visto al embajador de chile casi defender a Jones Huala, hemos visto al ministerio de defensa hacer una presentación fuera de término de una orden judicial para devolverle tierras del regimiento de montaña de Bariloche, una institución parte de los sentimientos de la Patagonia”.
Por último, Berni cuestionó a la clase política y destacó “la rebeldía” de los estudiantes que protagonizan tomas en los colegios. “Celebro la rebeldía juvenil. La clase política en la argentina perdió la rebeldía, la noción de patriotismo, se arrodilla fácilmente ante todo tipo de poderes. Celebro que haya hombres y mujeres jóvenes. No estoy a favor de las tomas, debe llevarse adelante la discusión de otra manera, pero no acabaría con esa rebeldía juvenil que es el futuro de la dirigente política”, concluyó.