BUENOS AIRES (NA) — Las perspectivas para la economía argentina mejoran fuertemente para la segunda mitad del año, según los vaticinios analistas de mercado, hasta incluso la posibilidad de volver al mercado de crédito en 2025.
“La Argentina va a tener un upgrade de la calificación crediticia antes de fin de año”, dijo Gabriel Vidal, Gerente de RR.II. de Criteria durante la presentación del informe sobre perspectivas económicas globales y de Argentina, quien además aseguró que “para junio o julio la inflación puede llegar al 5%”, aún por debajo de los promedios del REM.
Para los economistas de la consultora, la Argentina seguirá al máximo el mantra del ajuste fiscal para ordenar las variables que le permitan el año próximo llegar al mercado internacional de crédito para hacer frente a sus compromisos.
“Si se tiene en cuenta que en 2025 tiene US$ 9.500 millones de compromisos más lo del 2026, Argentina tiene que volver a los mercados voluntarios de deuda. El rollover lo va a hacer sin ningún problema”, agregó Vidal.
Por su parte Nicolás Max Director de Asset Management, destacó que los pagos de este año están garantizados y que la tarea del ministro de Economía Luis Caputo es la de alcanzar los mercados externos en 2025.
“Si el Gobierno es exitoso en sostener el equilibrio de las cuentas fiscales, mantiene el objetivo de al menos tener superávit primario y empieza a recomponer la parte externa vía reservas, la Argentina rápidamente puede parecerse a la liga de los países con calificación B (y salir de la calificación triple C). Argentina va a tener un upgrade de calificación crediticia antes de fin de año”, aseguró Max.
Por otro lado, los analistas reconocen que la suba de los bonos no se va a detener, lo que llevará a que el Riesgo País alcance niveles de 750 u 800 puntos en el segundo semestre.
En la previsión de corto plazo los analistas advierten para el segundo semestre una suba del consumo por el retorno del crédito pese al retraso de los salarios en términos reales.
“La economía puede rebotar rápido porque cuando la inflación caiga va a ser la variable consumo la que va a explicar la recuperación de la mano del retorno del crédito”, dijo Vidal y aseveró que para que esto suceda “no es necesaria una recuperación del salario porque cuando se le agrega el componente crédito se expande diretamente el poder de compra del salario”.
De hecho consideró que con la baja de la inflación se va a producir un piso en los salarios reales y un comienzo de recuperación de los mismos.
La salida del cepo es otra de las metas para el segundo semestre. En torno a esto, los analistas advierten que es un hecho factible y el viaje de Caputo de la semana próxima a la reunión del FMI puede ser la llave para adelantar esa posibilidad.