NEUQUÉN (ED) — Son miles los neuquinos que recién pudieron viajar por primera vez en avión, cuando aparecieron las low cost. Antes, Aerolíneas Argentinas (administrada por la agrupación ultra K, La Cámpora) monopolizaba prácticamente el mercado con precios muy altos, destinados a mantener la estructura política. Buena parte de la clase media neuquina no tenía más alternativa que viajar a Buenos Aires en ómnibus.
En paralelo, el gobierno provincial neuquino estaba literalmente obligado a comprarle los pasajes exclusivamente a esa compañía; pero eso terminó (ahora) con un decreto que habilitó algo lógico: la posibilidad comprarle los tickets a la compañía que los venda más baratos. Esto se ajusta al plan de ahorro y de eliminación de gastos innecesarios del Estado, que puso en marcha la nueva administración provincial para reforzar las partidas de Salud, Educación y Seguridad. Pero esta posibilidad de comprar a mejor precio disgustó a un grupo de diputados neuquinos.
La que encabezó la queja fue la diputada Lorena Parrilli (del bloque kirchnerista), quien presentó un pedido de informes para conocer el alcance del decreto provincial que habilita a comprar pasajes aéreos de cualquier compañía para traslados oficiales. Desde la Legislatura se explicó que la normativa deroga el decreto 1111 del 2013, que promovía la adquisición de pasajes por parte del Estado en la aerolínea que manejaba La Cámpora. Por aquel entonces la presidenta era Cristina Fernández de Kirchner y el gobernador era Jorge Sapag.
En sus fundamentos, la legisladora dijo que la nueva medida “coincide temporalmente con un ataque sistemático del gobierno nacional (de Javier Milei) a las empresas públicas”; y agregó que Aerolíneas vuela rutas que no resultan rentables para otras compañías. Condicen con ella los diputados Darío Peralta y Darío Martínez (compañeros de bloque), Gerardo Gutiérrez (MPN) y Andrés Blanco (Frente de Izquierda).
Las low cost hicieron su aparición en el mercado argentino, durante el gobierno de Mauricio Macri. Luego con el regreso K, con Alberto Fernández como presidente, hubo un ataque contra esas compañías a punto tal que se cerró el aeropuerto de El Palomar (conurbano bonaerense), donde operaba Flybondi.
La arremetida del kirchnerismo contra las aerolíneas que le permitieron a infinidad de familias viajar por primera vez en avión, fue dura. En diciembre de 2021, José Luis Espert dijo que “Aerolíneas Argentinas es un nido de ratas de La Cámpora”. Reaccionó con esas palabras al decreto con el que el gobierno de entonces buscaba recuperar el monopolio de Aerolíneas.
Fernández acababa de estampar su firma en el decreto con el que se regresaba al esquema de tarifas máximas y mínimas a los pasajes aéreos que había eliminado Macri. Así buscaba darles un golpe a los pasajes económicos, en desmedro de los usuarios.
